Este fin de semana se daban las condiciones idóneas para salir a hacer astrofotografía pero estaba realmente agotado y como no quería forzar la máquina más de lo que debería decidí quedarme por casa.
A mí Netflix me entretiene durante un rato pero me he acostumbrado a no quedarme mucho tiempo quieto.
Así que ayer cuando tuve la oportunidad salí al balcón de casa y monté «los trastos» para intentar fotografiar la Nebulosa de Orión.
Lo gracioso del asunto es que la Nebulosa es visible desde la terraza, pero la Polar NO. Así que me lo propuse sabiendo que no iba a poder sacar nada decente.
Lo monté todo y lo orienté (gracias al teléfono) a donde se suponía que estaba la polar. Intenté ser lo más preciso que pude pero evidentemente por muy preciso que quieras ser si no tienes visión directa con la Polar no tienes nada que hacer.
Hice la primera foto con 1 minuto de exposición y, como era de esperar, las estrellas dejaban un largo rastro en el cielo. Lo lógico en estos casos es que no pueda hacer exposiciones más largas de 5 segundos sin el motor de seguimiento. Lejos de rendirme a las primeras de cambio continué con mi pequeño experimento.
Comencé a girar poco a poco el trípode en sentido contrario al rastro de las estrellas y pude comprobar que pasaba de 5 a 10 segundos. Volvía a girar el trípode y conseguía 15, 20… Hasta que pude dejarlo en 30 segundos.
Intenté en varias ocasiones llegar al minuto de exposición pero fue totalmente imposible. Os puedo asegurar que incluso con visión directa de la polar tienes que ser muy preciso con todo para conseguir tiempos de exposición bastante largos.
Habiendo conseguido 30 segundos me dije que podía hacer un apilamiento de todas esas imágenes y este es el resultado:

Es cierto que tengo una mejor versión de esta Nebulosa. En aquella ocasión pude usar mi 70-200 a 200mm y pude obtener un tiempo de exposición de 1 minuto. Fue todo un logro para mí llegar a poder tener una exposición de 1 minuto.
Y ahora os pongo en perspectiva de la imagen anterior.
Al lado de la terraza de casa tengo una farola LED que arroja bastante potencia. La constelación de Orión es visible durante un par de horas desde casa. No tengo visión directa con la Polar y no pude realizar el alineamiento de manera correcta. Utilicé (esto fue por capricho mío) un objetivo Pentacon 135mm 2.8 de hace 40 años… Aún con todos esos contratiempos pude obtener la imagen de arriba que me resulta todo un logro.

Pude capturar casi 45 minutos de datos con la cámara. No todo sirvió al final, pero estoy contento con el resultado. Es cierto que no son mis mejores fotos, pero me sirve una vez más como entrenamiento para cuando pueda ir a fotografiar algo más en serio.

Me ha alegrado mucho poder hacer este tipo de fotografía desde casa. No es algo que vaya a repetir muchas veces porque realmente es muy complicado. Lo cierto es que con un poco de esfuerzo y paciencia se pueden sacar buenos resultados desde casi cualquier lugar.
Espero seguir aprendiendo y poder compartirlo aquí.
Feliz semana.